Buscador

Resultados (2):

(Las palabras buscadas pueden estar en el interior de los archivos PDF)
PDF 907.9 KB (533 descargas)

El objetivo de esta revisión es destacar y poner en prospectiva el potencial y la factibilidad que tiene el cultivo de especies nativas de las Yungas subandinas, Physalis peruvianay P. pubescens,en Argentina.Ambas producen frutos de similares características entre sí, siendo casi indistinguibles. Algunas denominaciones del fruto son Physalis, uchuva, capulí, aguaymanto, Cape goosberry o goldenberry. Es una fruta exótica de creciente interés mundial, fundamentalmente por sus propiedades nutracéuticas y excelentes precios en Europa y EE.UU., donde se considera fruta “speciality”. Crece en ambientes con rangos térmicos de 5 a 35°C, con temperatura base de 6,29°C y óptima de 21°C. Necesita suministro de agua constante, con demanda en el rango de 1000 a 1800 mm de precipitación bien distribuidos durante el año. Las principales plagas son Epitrix cucumeris (Coleoptera), Chloridea (Heliothis) subflexa (Lepidoptera) y Liriomyza sp. (Diptera). El patógeno más importante es Fusarium oxysporum, le siguen Phoma sp., Pythium sp., Cercospora physalidis y Sclerotinia sclerotiorum. El fruto puede ser afectado por patógenos de postcosecha como Botrytis sp., Cladosporium, Pestalotia y Phomopsis. En Tucumán, INTA Famaillá realizó pruebas de adaptación con ambas especies de Physalis, verificándose su viablidad agronómica. El NOA se ha desarrollado como polo agroexportador de berries frescos hacia el hemisferio norte, donde también se encuentran los principales mercados consumidores de uchuva, constituyendo una oportunidad. La transformación de la uchuva permite la elaboración de productos estables sensorialmente agradables, que amplían las posibilidades de comercialización y permiten el agregado de valor (pulpa, néctares, jugos, mermeladas, deshidratados, barras energéticas, salsas, helados, etc.).

PDF 720.2 KB (528 descargas)

Nuestro objetivo fue evaluar la supresión de la infección ocasionada por el nematodo Meloidogyne incognita en raíces de tomate previamente colonizadas por hongos micorrícicos arbusculares (HMA) nativos de la Provincia de Buenos Aires. Plantas de tomate fueron inoculadas a la siembra con un consorcio con HMA: HMA0, HMA50 y HMA100, correspondientes a 0, 50% y 100% del sustrato con HMA (8 repeticiones). A los 40 días las plantas inoculadas presentaron micorrización superior al 60%. Las plantas fueron trasplantadas y cada tratamiento fue inoculado o no con M. incognita (4 repeticiones de cada tratamiento HMA). A los 115 días de crecimiento las plantas inoculadas con HMA sin nematodos evidenciaron micorrización superior al 90%. Las plantas inoculadas con nematodos mostraron disminución de la micorrización que superó la obtenida al trasplante. La inoculación con HMA disminuyó la abundancia de larvas de nematodos (j2) en el suelo y el número de agallas en raíces. El crecimiento aéreo no fue afectado por la inoculación (ni por HMA ni por nematodos); sin embargo, las plantas HMA0 (independientemente de la inoculación con nematodos) evidenciaron mayor crecimiento radical. Esto sugeriría una estrategia de compensación del menor volumen de exploración radical de la planta hospedadora en ausencia de hifas de HMA. Nuestros resultados evidencian reducción de la densidad de nematodos por la inoculación con HMA. Concluimos que el adecuado establecimiento de la micorrización previo a la infección con nematodos ejerce un aparente control de la infección de M. incognita en raíces de tomate. Esto sería estratégico para el control biológico de patógenos de cultivos hortícolas.

Licencia Creative Commons Horticultura Argentina es licenciado bajo Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial 2.5 Argentina